Propuesta de mejoras en la neutralización de pH en residuos industriales líquidos de la planta Danone-Chillán

Abstract

Los continuos y cada vez más apresurados avances que se han realizado desde los comienzos de la revolución industrial hasta el día de hoy, marcan significativamente el diario vivir de las personas, proporcionando herramientas que facilitan las actividades diarias, mejoran la salud y la calidad de vida. Sin embargo estos progresos traen consigo efectos colaterales, que no siempre son amigables con el medio ambiente. Estos efectos han comprometido la propia existencia como la de las demás especies, con quienes comparten el planeta. En consecuencia, la industria como gestora de desperdicios contaminantes tiene la responsabilidad ética de ser partícipe en la recuperación, tratamiento y posterior liberación al medio ambiente de las emisiones y descargas, aplicable tanto a los productos como los procesos, sin causar un impacto negativo. De esta manera se debe conseguir un equilibrio entre el progreso necesario, manufacturando mejores productos a menores costos, y a su vez dar un cumplimiento a las leyes nacionales e internacionales, además, siendo eficaces y eficientes en mercados cada vez más competitivos. En los procesos industriales de producción alimentaria, celulosa, pesquera y petroquímica se generan grandes volúmenes de residuos líquidos, conocidos como “Riles” que, por lo general, pueden ser vertidos de manera directa a afluentes acuosos como ríos o el mar, todo esto mediante un previo tratamiento, para evitar o disminuir su potencial contaminante. Estas exigencias se encuentran legalizadas y reglamentadas bajo normas de emisión.Como un ejemplo claro de lo que no debe suceder, se puede mencionar que, en el año 1988, en la región del Bio-Bio, específicamente en Talcahuano y San Vicente, se alcanzaron los niveles más críticos por contaminación de “Residuos Industriales Líquidos” vertidos al mar; algunos de los daños creados en ambientes marinos próximos a la costa fueron:  Creación de bolsones de agua sin oxígeno.  Aumentos en la temperatura.  Presencia de grasas y grasas insolubles en superficie del agua.  Malos olores producidos por estos elementos no disueltos. Este tipo de situaciones son la que han llevado a grandes empresas, gobiernos y a la comunidad en general, a tomar cartas en el asunto, supervisando y poniendo en regla las políticas existentes, logrando así un equilibrio entre lo que se espera de la producción y el cuidado de los cuerpos de aguas. El país cuenta con normativas y reglamentos para la descarga de riles, en las que encontramos:  Reglamento para el manejo de lodos generados en plantas de tratamiento de aguas servidas.  Regulación de descargas de residuos industriales líquidos al sistema de alcantarillado.  Regulación de todo tipo de descargas a aguas marinas y continentales.  Regulación de descargas de residuos líquidos a aguas subterráneas. Norma chilena sobre requisitos de calidad del agua para diferentes usos. Junto con ello, existe la superintendencia de servicios sanitarios (SIIS) y la ley 18.902 que otorga el control de los residuos industriales líquidos (RILES) a la SIIS y las empresas sanitarias de cada región, como es el caso de Essbio S.A. en esta región. Para el correcto cumplimiento de su labor, este organismo genera resoluciones, oficios, instrucciones y procedimientos sobre materias específicas respecto a un tema de competencia regulatoria o que afecte a una empresa en particular. (FUENTE: www.siss.gob.cl). Con estas acciones se logra un ambiente más sano, limpio, seguro para la población y la sustentación de nuestro planeta.